El resultado de una historia es muchas veces la solución a un problema. Así pasa en este cortometraje del polivalente David Castro, donde se nos plantea un problema matemático de casuística avanzada sobre las casualidades, encuentros y desencuentros, en clave de humor, de un par de jóvenes tímidos y condenados a enamorarse. En realidad, es un cuento con su planteamiento, nudo y desenlace, pero que sorprende con un conglomerado de elementos de dirección y guión realmente brillantes, anárquicos y algo destartalados, que no responden precisamente a las ciencias exactas.
Ganador del Primer Premio al mejor cortometraje en formato vídeo del VII Festival Internacional de Cortometrajes de Torrelavega, del Primer Premio al mejor cortometraje del VII Certamen de vídeo de la Universidad de Burgos, y del Premio al Mejor Guión en la VIII Muestra “Cortos de Aquí” de Elda (Alicante), además de menciones en numerosos festivales internacionales, encontramos el mayor mérito de esta historia en el cariño con que su director trata a Berta y a Luis, sus dos protagonistas, en base a un realismo mágico marcado por un excelente guión, montaje y música (todo obra del cineasta).
En sus casi 15 minutos de duración, hay mucha ternura, mucho friquismo, mucha burla y mucha empatía con situaciones cotidianas en las que la mayoría de las veces ni nos fijamos. Y aunque se trata de un problema matemático, como siempre, la variable –en forma de destino– rompe todo el proceso ecuacional y nos da hasta la solución servida en bandeja, junto con alguna que otra sorpresita final. Quedamos contentos y sonrientes. ¿Para qué más?
Berta y Luis (shortfilm) from David Castro González on Vimeo.