Lleva circulando por la red alrededor de un mes y está dejando pasmados no solo a los incondicionales de la saga Alien, impacientes ante el estreno de la precuela Prometheus, del absolutamente genial Ridley Scott, sino a las cabezas pensantes del marketing viral y la publicidad on line. Porque no se trata de un tráiler. Bueno sí, pero no exactamente. Es un anuncio de Industrias Weyland donde nos presenta a su modelo tecnológico David, a quien interpreta nuestro reverenciado Michael Fassbender.
Conocemos a este robot a través de la entrevista que le realiza una voz en off (o en código binario) y en ella nos muestra su lado más pragmático, humano y emocional. Efectivamente, emocional. En tan solo dos minutos, caes a sus pies. Obra de Fassbender, el nuevo rey de la interpretación masculina mundial, y de Scott, embarcado en una campaña promocional de su película basada en pequeños goteos de escenas y suspense que está resultando de lo más persuasiva.
La película, aunque concebida como una suerte de “Episodio 1” de la saga, tiene un argumento totalmente independiente, fuera de los lazos que han unido otras precuelas históricas a sus predecesoras como las de Star Wars o la de El planeta de los simios. Cuenta la aventura de la nave espacial Prometheus, a finales del siglo XXI, siguiendo un mapa estelar originario de antiguas culturas sobre la existencia de una avanzada civilización alienígena. Con Fassbender, comparten el reparto Guy Pearce, Charlize Theron, Moomi Rapace e Idris Elba. Con el primero, con el modelo David, os dejamos. A ver quién no se lo pide para su casa. Aunque avisamos de que no dejan número ni teléfono ni enlace de compra por Internet ni nada. Solo a él. Perfecto. Inigualable.